Nuestros peques de dos años han conseguido este bonito caracol con muy pocos materiales. Han necesitado, plastilina para el cuerpo con el que han trabajado la motricidad fina, una castaña para el caparazón, un fruto propio de la estación otoñal y, dos bastoncillos en su cabeza como cuernos.
¡Se lo han pasado genial! ¡Caracol, saca los cuernos al sol!